Arranca el año lectivo .
Ya acondicionamos mochila, vasito, mantel y servilleta.
Ya compramos útiles, forramos e hicimos carátulas.
Organizamos horarios laborales y domésticos para poder llevar y traer.
Ya hablamos positivamente del jardin/escuela…para motivar a nuestro peque a volver o iniciar feliz esta etapa.
Ya firmamos papeles.
Ya hicimos cartillas.
Ya contratamos movilidades.
Ya compramos meriendas.
Que falta??????
Estamos tan apurados en hacer bien todo eso👆🏻👆🏻👆🏻 que a veces no nos detenemos a pensar en qué sentimos nosotros y en cómo se siente nuestro hijo con este nuevo comienzo.
Démonos tiempo y démonos permiso para estar ansiosos y un poquito tristes. Dejarlos al cuidado de alguien que no lo conoce como vos…es difícil.
Siempre pienso y ruego que le toque una seño cariñosa y perceptiva que lo haga sentir en casa…. pero a veces no nos toca esa seño.
Lo de afuera no podemos controlarlo, pero lo de casa si.
Bajemos ansiedades… preparemos juntos las cosas, charlemos sobre la posibilidad de hacernos llamar si hace falta. Ofrezcamos una foto en el bolsillo para que sientan acompañados.
Hagamos un corazón con el nombre de toda la gente importante para que viaje a la escuela en la mochi y acompañe.
Esos primeros días de clase trata de acompañarlos, no importa si tiene 3 años o 13… llegan con ansiedad igual.
Al volver a casa sentate y mirándolo a los ojos preguntá: que tal estuvo? Con quien te sentaste? Saliste al recreo? Compartiste merienda con alguien? Cómo te cayó la seño? Te sentiste cómod@?
Hace preguntas dirigidas, serias, enfocadas…
En una cabecita que no la paso bien las preguntas abiertas:
Como te fue?
Que tal la seño?
Lo pásate bien?
Te gusto?
….no sirven. No le dan lugar a pensar y hablar de cómo le fue..
Estos primeros días de clase son raros, ansioso, angustantes, desafiantes…para ellos y para nosotros.
Te abrazo…
Tenete paciencia
Abrazalo mucho
Son unos días y todo empieza a fluir.
Dra. Claudia Duano